Carlos Santana brindó un virtuoso a la vez que frío show en la Argentina

Buenos Aires, 10 de marzo (Reporter, por Laura Lunardelli). En una noche tan
fría como su público, el eximio guitarrista mexicano Carlos Santana brindó
en el Campo Argentino de Polo un show en el que se vivaron sobremanera los
hits de sus más recientes trabajos discográficos, es decir la trilogía
compuesta por "Shaman", "Supernatural" y "All that I am".

Amén de su parquedad para comunicarse con la gente Santana puso todo de sí
para imprimir ritmo a su concierto y lo logró por ratos, en un predio
repleto aunque con el espacio limitado por las butacas "vip" del campo.

Precisamente el público del sector "vip" fue el más indiferente. No así las
plateas alta y baja, desde donde bajaron los gritos de aliento para un
guitarrista que, habiendo visitado por primera vez la Argentina en 1973, no
escatimó elogios acerca de los cambios experimentados por el país en los
últimos tiempos.

El concierto comenzó 45 minutos tarde, producto de la demora en el ingreso
del público. En tanto, la gente se entretuvo haciendo extensas colas frente
a los puestos de venta de comidas y bebidas a altísimos precios, detalle
poco importante dado el elevado poder adquisitivo de los concurrentes.

Faltaban diez minutos para las once de la noche cuando Santana apareció en
escena, con su típico gorro de lana negro y una camisa con los colores
rastafari y varias veces reproducido el rostro de Bob Marley.

"África Bamba" fue el primer tema que sonó, tras una intro instrumental
multigénero y casi tribal. "Buenas noches, ¿cómo estamos? ¿están cansados?",
inquirió Santana. Y, apenas el público dijo "no", respondió "parece, porque
están sentados", acaso para dar cuenta de la pasividad de sus admiradores.

Y tras calificar la noche como "deliciosa" e invitar con una inyección de
emoción en las venas, el instrumentista interpretó canciones como "María,
María" -con rapeo propio-, y "Foo Foo", en la que el público, por fin, dejó
de tomar fotos con sus teléfonos celulares para dedicarse a bailar.

Para no cortar el ritmo, y haciendo honor a su don de improvisador, Santana
inquirió "¿saben quién es este?", señalando al Bob Marley de su camisa.
Siguieron las canciones "Exodus" y "Get up, stand up"del jamiaquino y el
rito de la presentación de la banda que repetiría al final del recital.

Chester Thompson en teclados (felicitado en escena por su cumpleaños), Benny
Rietveld en bajo, Dennis Chambers en batería, Andy Vargas en voz, Karl
Perazzo en percusión y timbales, Bill Ortiz en trompeta, Jeff Cressman en
trombón, Tommy Anthony en guitarra y coros y Raul Rekow en congas y
percusión acompañaron a Santana.

Siguieron "Jingo" y una gran alabanza de parte del guitarrista para la
Argentina y su gente. "¡Felicitaciones! Cada vez que regresamos se ve más
luz, más esperanza, más conciencia. Me encanta saludarlos porque esta es una
Nación muy especial... ¿por qué? por su corazón".

"Mi propósito es darle gracias a Dios primero, porque todos los ceros a la
derecha no valen nada si no tienen uno a la izquierda, y ese uno es dios, lo
llames como lo llames. Quiero recordarte que venimos de la luz, que estamos
aquí para hacer una diferencia, para ser diferentes de George Bush", dijo,
casi en un rezo místico, y cerró con un "que el cielo se abra y los ángeles
bendigan a ustedes con su propia luz".

Al tiempo que en las pantallas gigantes aparecía la imagen del planeta
Tierra y una paloma de la paz sobrevolándolo, empezaron a sonar los primeros
acordes de "Yaleo". El cierre fue con "Black magic woman" y la celebrada
"Oye como va".

Para los bises quedaron las canciones preferidas del público, es decir, los
más recientes hits, y la presentación en el escenario de un invitado local
aunque compañero de ruta de Sanatan en los Estados Unidos.

"Directamente desde Buenos Aires: Alejandro Lerner", se anunció. Y junto a
Santana el músico argentino interpretó "Hoy es adiós".

Para el final del concierto de más de dos horas realizado en el marco del
festival Personal en Vivo quedaron temas como "Smooth", la invitación casi
en tono de exigencia de "¡Argentina, a gozar!" para la interpretación de
"Dame tu amor" y "Corazón espinado". (Reporter)

GL-LL