Attaque 77 plasma el Apocalipsis argentino en su álbum "Karmagedon"
Buenos Aires, 5 de abril (Reporter, por Laura Lunardelli). Son muchos los que asociarán "Karmagedon", nombre del flamante álbum de Attaque 77, a "Armaggedon" en su variante de videojuego o de película dirigida por Michael Bay y protagonizada por Bruce Willis, Liv Tyler y Ben Affleck. Y menos serán los que lo asociarán con el vocablo bíblico que refiere a la "revelación" o "Apocalipsis", que no es otra cosa que el desastre fatal y terrible que aguarda a la humanidad y que se puede traducir en el fin del mundo. Pero es en este sentido en el que va el trabajo.
" jugar con las palabras que oímos día a día, combinarlas o deformarlas a modo de ejercicio inconsciente, como lo hacen los niños, te puede llevar a resultados graciosos, disparatados y más de una vez reveladores ", dicen los integrantes de Ataque 77 para justificar el nombre de su novedad discográfica.
La portada muestra una vista aérea de Buenos Aires con una autopista colapsada por el tránsito. Ciro, Mariano, Luciano y Leo recorren, en coche, la ciudad. En el viaje, el paisaje que prima es el del deterioro diario al cual todos y cada uno de los argentinos se acostumbró en tanto sociedad.
En el disco se suceden personajes como el político corrupto ("Buenos aires en llamas"), el cartonero ("Cartonero"), la mujer golpeada ("Vórtice") y hasta el rockero autocrítico ("Frente al espejo").
Pero, amén de lo que indican su título y su portada, no todo es caos en "Karmagedon". Su lírica no solamente denuncia lo que está pasando social y políticamente en la Argentina. Invita a la reflexión y a la acción.
"Si es que parece que así vamos nomás / con la cabeza baja y sin ganas de mirar / sin una sonrisa, inertes y a pura agresividad / y a vos no te conforman con esta realidad / porque sos un loquito sensacional / que vas con la esperanza en piloto automático sin más / y yo me siento igual, quiero morir viviendo y no vivir muriendo", dice la letra de "Ejército de salvación", algo así como el oasis de optimismo de "Karmagedon". (Reporter)
LL
" jugar con las palabras que oímos día a día, combinarlas o deformarlas a modo de ejercicio inconsciente, como lo hacen los niños, te puede llevar a resultados graciosos, disparatados y más de una vez reveladores ", dicen los integrantes de Ataque 77 para justificar el nombre de su novedad discográfica.
La portada muestra una vista aérea de Buenos Aires con una autopista colapsada por el tránsito. Ciro, Mariano, Luciano y Leo recorren, en coche, la ciudad. En el viaje, el paisaje que prima es el del deterioro diario al cual todos y cada uno de los argentinos se acostumbró en tanto sociedad.
En el disco se suceden personajes como el político corrupto ("Buenos aires en llamas"), el cartonero ("Cartonero"), la mujer golpeada ("Vórtice") y hasta el rockero autocrítico ("Frente al espejo").
Pero, amén de lo que indican su título y su portada, no todo es caos en "Karmagedon". Su lírica no solamente denuncia lo que está pasando social y políticamente en la Argentina. Invita a la reflexión y a la acción.
"Si es que parece que así vamos nomás / con la cabeza baja y sin ganas de mirar / sin una sonrisa, inertes y a pura agresividad / y a vos no te conforman con esta realidad / porque sos un loquito sensacional / que vas con la esperanza en piloto automático sin más / y yo me siento igual, quiero morir viviendo y no vivir muriendo", dice la letra de "Ejército de salvación", algo así como el oasis de optimismo de "Karmagedon". (Reporter)
LL
<< Home